Alejandro Camacho asegura que le gustaría morir con su esposa en París o RomaAlejandro Camacho soñaba ser director de orquesta mientras estudiaba en el Conservatorio Nacional de Música pero esta idea se truncó cuando asistió a la puesta en escena de El diario de un loco, y ahí fue cuando dijo que quería ser actor. Este deseo no tardó en cumplirse cuando incursionó al teatro, cine y televisión, en 1986 participó en un clásico de telenovela: Cuna de lobos.
Al preguntarle qué le apasiona, aseguró que le enloquecen las mujeres. "Tengo una esposa guapísima (Rebeca Jones) y muy talentosa, loca como cabra, inteligente como robot, y muy apasionada, cumple con todos los requisitos. Nos gusta mucho platicar, escuchar música y leer, bailar no porque parezco guajolote en lodo, pero echo buen desmadre (risas)".
Algunos datos curiosos que el actor confesó es que ha tenido varios acercamientos con la muerte, casi fallece de una infección en el hígado, también estuvo en el Reclusorio Oriente por la acusación de no haber cumplido un contrato de compra-venta de un inmueble. Ha estado amenazado de muerte, de secuestro y he tenido protección federal.
Además declaró:...
..."Me gustaría morir con una chava a toda madre, con Rebeca, viajando a París o Roma. Aunque si es en un escenario, que sea en una obra de Moliere, para morirme como él".
Respecto a su trabajo e Alma de hierro señaló que ha sido un trabajo duro, "tengo que aprenderme un promedio de cinco mil escenas de leche, dulce, manteca y chile. Vivo a salto de mata, como ladrón de ideas, de gestos.
Finalizó diciendo que le gusta mucho el proyecto de Alma de hierro, porque empezó como una historia chistosa y se ha ido desgranando, aseguró que no es predecible, pero sí muy cercana a lo que pasa cotidianamente".
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