En la nueva telenovela de TV Azteca, Mujer comprada, el actor comparte créditos con Gabriela Vergara y CynthiaUna de las cosas que le plantearon al actor José Ángel Llamas para regresar a protagonizar la nueva telenovela de TV Azteca, Mujer comprada, fue volver al look de bigote con el que se dio a conocer en el mundo del melodrama.
Aceptó e inmediatamente lo comenzaron a recordar en la calle y supo que el bigote era una especia de fetiche que causaba sensación.
A principios de 2008, cuando regresó a México para el proyecto Vivir por ti, llegó rasurado y nadie le hizo caso, pero desde que recupero su bigote como en su primer telenovela Nada personal (1996), todo cambió.
“Eso era la plática inicial (con TV Azteca) y ha sido curioso, porque todas las novelas que he hecho afuera, han sido sin bigote, pero esto ha sido una marca registrada en México, lo cual me gusta, también podría proponer cosas diferentes, pero me he encontrado en la calle con la propuesta de ‘por favor no se lo quite (el bigote)’, y empezando con el aeropuerto, porque en pláticas para el proyecto venía sin bigote y cuando viene para la telenovela que me lo estaba dejando, en cuanto me encontré con la señorita de migración me dijo ‘qué bueno que está de vuelta’, a lo que dije: ‘Válgame Dios, tengo que dejármelo más seguido’”.
Desde Nada personal cuando personificó a un camarógrafo que le salva la vida a su futura enamorada, José Ángel se convirtió en...
...un galán diferente en la televisión mexicana, a partir de ese momento a Llamas le tomaron un cariño especial pese a que en 1999 salió de TV Azteca con rumbo a Miami, siendo su última telenovela Háblame de amor.
Sin embargo, el proyecto que más satisfacciones le provoca fue Tentaciones (1998), donde dio vida al sacerdote enamorado Gabriel Segovia y que causo ruido hasta en Gobernación. “Eso es algo que no alcanzo a agradecer a la gente que me apoyó, porque he hecho muchos más proyectos fuera que en México. Me fui hace muchos años, pero la gente me sigue recordando como si hubiera sido antier, recuerdan muy bien los proyectos que hice, creo que cada proyecto cambio mi vida y nunca se olvida”.
Hoy José Ángel Llamas es diferente, al lado de su esposa, la puertorriqueña Mara Croatto, con la que comparte hijos y tienen uno en común; además en febrero se convirtió al cristianismo.
¿Te sientes un actor maduro?
“Creo que la carrera es muy larga, de mucha resistencia y persistencia; a mí me da emoción, porque uno nunca sabe en donde está, quizás el año pasado estaba en un lugar, el antepasado en otro, y eso me recuerda proyectos lindos de formación para mi vida, pero el futuro trae cosas interesantes”.
¿Lograste que te conocieran en el mundo (de las telenovelas)?
“Me fui inicialmente con una productora argentina para hacer un proyecto y la verdad es que me entusiasme, porque creo que los atributos de un actor se deben a su trabajo. A ese proyecto le fue muy bien y todavía no terminábamos con ese y me llamaron para la siguiente en Colombia, después conocí a unas personas de Telemundo que me llevaron de vuelta a Miami, después viajé a Dallas, regresé a México, me fui a Miami y de Telemundo me fui a Univisión, empresa que deje hasta apenas hace dos meses”.
¿Te fuiste de México, por no tener trabajo?
“Sí tenía trabajo, pero yo vivo un día a la vez. Me gusta mucho disfrutar el momento y tuve una propuesta interesante, me gustó y quise aventurarme, pero tampoco tenía invitaciones para regresar a mi país”.
¿Sigues en la postura, de a dónde te llamen te vas ?
“En donde haya trabajo ahí estaré, me encanta conocer lugares, imagínate estar en Argentina, Chile, Venezuela, Perú, es muy rico. Si disfrutas lo que haces, lo demás viene por añadidura”.
¿Sentiste que el melodrama se agotaba en México?
“En el melodrama y en el entretenimiento no se agota nada, prueba de ello es que de pronto puedes ver que se les da vuelta a las historias y siempre es interesante y creo que también había productoras para proponer”.
Argos te trajo de regreso en una telenovela, ¿Por qué aceptaste el proyecto de “Mujer comprada”?
“La historia me gusta, sugiere cosas que no son comunes como comprar un vientre, será interesante plantearlo, obviamente todo se hará por amor”.
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