Para no quedarse sin trabajo, Navarro quiere dar vida a su propia productora y convertirse a la vez en promotora culturalSilvia Navarro ha demostrado que no tiene límites y que ser independiente le sienta bastante bien. Y para muestra basta un botón.
Después de debutar y trabajar 10 años en Televisión Azteca, de dedicarse a hacer cine y teatro mientras la mencionada empresa le liberaba su contrato y después de brillar como protagonista en Mañana es para siempre, con Televisa (donde no hay documento que la ate a la empresa), Silvia adelanta que está en la construcción de un equipo de trabajo para crear y producir series de televisión.
En entrevista exclusiva, la actriz de 30 años originaria de Irapuato, Guanajuato, añade que también le gustaría promover espectáculos realizados en México.
Tras subrayar que "desde un principio en la profesión uno se enfrenta a grandes retos por tratarse de una carrera de resistencia, porque yo también he tenido que pedir trabajo", ahora está dispuesta a implementar una nueva estrategia de autoempleo, al debutar como productora.
"Esto surge como una oportunidad que me interesa darle a la gente para que escriba. Hay muchas cosas por decir. Me encantaría producir algunas de ellas. Estuve con un equipo de trabajo, entre escritores y gente de producción, haciendo cosas de series y más; también queremos hacer un espectáculo.
En México hay mucho talento y debemos impulsarnos. Estamos calculando los precios y principalmente enfocándonos a tener la historia de la serie; después la presentaremos a alguna televisora o un canal o gente de producción que le interese", explica la estrella de Cuando seas mía (2001).
-¿En qué clase de espectáculos te gustaría involucrarte?
-Me interesa que haya espectáculos en México que se den a conocer mucho más. Tal vez sería mucho más orgulloso para nuestro país mostrar algo de México para todo el mundo. De espectáculo me refiero a teatro, música, danza, de todo.
Considera dejar la actuación
Curiosamente, aunque hoy es un icono de las telenovelas en el país, Silvia, quien debutó en un comercial de pañales a los dos años, confiesa que en sus inicios dudó en dedicarse a la actuación por lo exigente que fueron con ella, al tiempo que aceptó haber perdido el piso por la fama.
"Justamente por ese comercial me invitaron a estar en Mujer marcada con Sasha Montenegro y Jorge Vargas, entonces yo ya me sentía actriz desde que tengo uso de razón, ¿ves? -bromea-. Hice otros comerciales, estuve en foros e hice castings", recuerda.
En la actualidad, Silvia, quien da vida a Fernanda en Mañana..., es una mujer sencilla y dicharachera. Aunque su figura podría ser resultado de la lucha constante que emprenden actrices por mantenerse en forma y conseguir el "gran papel de telenovela", ella rechaza regirse por esos estándares.
Precisa que...
...se siente bendecida por los genes que le heredó su progenitora.
"Aunque de un tiempo para acá he empezado a salir a correr; también hago kick boxing en casa", manifiesta quien a sus 20 años debutó como actriz de telenovela en Perla (de TV Azteca) la cual protagonizó.
Seis años antes participó en el programa A la cachi cachi porra.
-¿Cuándo perdiste el piso?
-Te da un lapso en que como que te valen las cosas. La verdad es que muchas veces uno se tiene que poner en un lugar; es muy fácil que la gente pase por encima de ti si tú lo permites. Lo importante es no perder lo que tú eres y respetarte para los demás también lo hagan.
"Muchas veces se nos puede pasar la mano, pero mi familia y mis amigos son los que siempre han estado al lado mío y me dicen "no; bájale tres rayitas"... Uno tiene que luchar por su lugar y te vale, aunque hay que medir con quién y dónde".
El año pasado protagonizó la película Amor letra por letra; está por estrenar La cabeza de Buda; agrega que hay otro proyecto más pero del cual se reserva los detalles.
-A lo largo de tu carrera, ¿te ha tocado quien te ofrezca droga?
-Hay gente de todo. Uno da pie o no a que sigan. No he tenido problema con eso. Creo que uno jala ese tipo de gente; llegan y se van.
Silvia agrega que ser protagonista de telenovela es una bendición, "pero por otro lado te cierras, a veces, se cierran sobre los mismos estereotipos de la chica de la historia. A mí me gustaría dar unos dos o tres cambios para que la gente no se aburra... Quiero sentir que mis personajes han evolucionado".
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