Inquieto por naturaleza, Valentino Lanús, quien actualmente es uno de los actores más solicitados en el espectáculo nacional y acaba de terminar el melodrama Las tontas no van al cielo, soñaba con hacer cine y hoy, después de seis años logra cumplir ese anhelo con la presentación de Véritas: el príncipe de la verdad, cinta que produce y que fue dirigida por Arturo Ruiz Esparza, quien ganó el Oscar estudiantil con su documental El matador.
Ahora con la euforia de haber alcanzado este objetivo y con la alegría que justo en este mes nos llena a todos los mexicanos, Valentino platicó con Excélsior sobre la satisfacción que siente por ser mexicano, del orgullo que lo embarga por las tradiciones, símbolos e idiosincracia que nos distinguen en el mundo.
Netamente mexicano, nacido en la colonia Doctores, Valentino enumera las virtudes por las que México es todo para él.
“Tengo un sentido patriota muy desarrollado, amo a México por millones de motivos, por eso quiero hacer muchas cosas fuera de mi país para poner en alto el nombre de mi tierra, es una forma de pagarle todo lo que ha hecho por mí”, dijo el actor.
Aunque las celebraciones de las fiestas patrias encierran un hecho histórico relevante, como es el inicio de la guerra de Independencia, también es cierto que sirve como pretexto idóneo para convivir con amigos, Lanús comparte con este diario su manera de “dar el grito”.
“La verdad es que mi vida no es nada fácil y siempre varía, la mayoría de las veces estoy en lugares diferentes, pero creo que todos estamos bien conscientes del valor y lo que representa este mes patrio, pero hay algo que a mí me preocupa
específicamente en este tiempo y es ese sentido de pertenencia y de poseer y de valer por lo que tienes. Nos hemos contaminado de ese mundo básicamente norteamericano, de valer por lo que tienes, eso es muy triste.”
El actor va más allá y, con toda franqueza, hace una que otra sugerencia que espera lleguen a las personas indicadas dentro de la política nacional.
“Si pudiera aconsejar a un presidente le diría que se armara una campaña de estar orgullosos de lo que somos los mexicanos, antes el chofer de un taxi se sentía feliz de serlo y así era con todos las profesiones, la satisfacción de hacer y ser del país era real, era un valor maravilloso y creo que se ha manchado en esta carrera de poseer, de globalización y modernidad. Lucharía por recuperar lo que éramos, por nuestros valores y raíces”, dijo Lanús, quien ha participado en telenovelas como Alborada y Amar sin límites.
El actor vivió más de un año en Estados Unidos, por alcanzar su sueño de hacer cine y por actuar una telenovela en Miami (Inocente de ti, 2004), en ese tiempo, la nostalgía lo hacía presa fácil y el sentimiento afloraba a cada momento.
“Es muy fuerte, sobre todo la primera vez. Te das cuenta y empiezas a tomar valor y conciencia de muchas cualidades que tiene México, pero también te recapacitas sobre los errores que tenemos los mexicanos. El primer mes que estuve fuera me llevaron a un lugar con mariachi y la verdad me pegó, ya tenía el ojito con lágrimas y un nudo en la garganta”, confesó Valentino, quien estando a miles de kilómetros de distancia se percató de que “México es fascinante, es uno de los países más ricos en
tradicones, valores y símbolos, los colores, la comida, las banderas, la música, son tantos símbolos que nos representan y cuando sales de tu país y vives en otro lado sí te llega fuerte la nostalgia, ahora sí que si he de morirme, que me lleven y me
entierren en México. Estoy muy orgulloso de ser mexicano, sí hay que avanzar, crecer y actualizar, pero, finalmente, debemos estar orgullosos de nuestras raíces, porque es la única verdadera arma que tenemos para enfrentarnos en el mundo, tenemos que
defender lo que somos y cambiar lo que nos hace daño y lo más importante es que no perdamos identidad”, acotó el productor y actor.
Otra de las cosas que a Lanús le han quedado claras estando lejos de su tierra es la importancia que tienen los inmigrantes mexicanos, que con todo su esfuerzo hacen mucho por México.
“He aprendido a valorar a los inmigrantes, a esa gente que se arranca del alma a su México para irse a otro país a conseguir una forma mejor de vida para su familia a costa de un sacrificio gigantesco y de un menosprecio, además de un trabajo sumamente arduo y con un idioma que no es el suyo, de verdad hoy por hoy los admiro, son personas tan honradas y honestas, que no me cansaré de defenderlos y exponerle al mundo lo difícil que es la vida cuando sales a buscar oportunidades. Debemos
estar orgullosos de ellos, porque las divisas que importan es algo que tiene que reconocerse y se tienen que alcanzar mejores condiciones de vida”, expresó el actor, quien en mayo cumplió 33 años.
Toda su infancia, sus mejores recuerdos y los sabores que conserva son de México, es por ello que Valentino tiene bien claro cómo defender esa idiosincracia.
“Mi pasión por México, por defenderlo y representarlo es con mi trabajo y proyectos. Necesitamos que se hable de nuestro país, pero no de la parte oscura, de los narcos o lo sucio, sino de lo que hay bueno, esa es la gran misión que tenemos los que
estamos haciendo cine”, aclaró Lanús.
Por otra parte, el actor asegura que los mexicanos somos afortunados al tener en nuestro país la mejor gastronomía, los paisajes más hermosos y un cúmulo de tradiciones y costumbres que nos hacen únicos en el mundo. Pero; hay algo que subraya.
“En cualquier actividad nosotros nos las ingeniamos. En Estados Unidos todo se compra, cada pieza tiene una función específica y no hay como reemplazarla, pero nosotros ¡lo hacemos! sustituimos cosas y eso es muy valioso en una industria donde
puedes sustituir cosas creativamente, eso tiene gran valor en el mundo pefeccionista de los anglos”, dijo el histrión.
Por supuesto, el tema de las mujeres no queda fuera de su orgullo nacional, porque para Lanús no hay mujer que supere el encanto de las nacidas en nuestro país.
“La belleza de las mujeres mexicanas es incoparable. Sus hábitos, el como se defiende a la familia, eso no pasa en otros lugres del mundo. Y algo que definitivamente nos distingue es el amor a la mamá y la importancia que tiene para todo, bien o mal”, aseguró el actor.
Y aunque reconoce muchos méritos en los mexicanos, destaca su peor defecto: “Debemos evitar la mediocridad es lo que nos tira. Tenemos que aprender a defender lo nuestro, a exigir a las autoridades lo que merecemos. Le pediría a los mexicanos que
no se conformen con lo que sólo se les da”, concluyó Valentino.
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